jueves, 3 de septiembre de 2009

Artículo Módulo EATIC








Educar en la Era de la Tecnología



Los procesos de enseñanza y aprendizaje se dan en el marco de una sociedad que le brinda un contexto desde donde surgir y hacia donde llegar.
Es por eso que, en intima relación, sociedad y escuela, se unen para reflexionar sobre cómo abordar las prácticas educativas que permitan a la escuela aplicar y recrear las herramientas y los marcos de trabajo propios de la nueva sociedad del conocimiento, de la información.


ALGUNAS COSAS NO CAMBIAN



Desde los inicios de al enseñanza a la hora de programar o planificar al tarea el docente responde de modo más o menos sistematizado a las siguientes preguntas: ¿Qué enseñar? ¿Para qué enseñar? ¿Cómo enseñar? ¿Qué recursos y materiales utilizar? ¿Cómo evaluar?
Las respuestas a estas preguntas estarán orientadas desde un marco teórico de trabajo determinando así el modo de transcurrir de una o varias clases, de un encuentro entre el saber y las personas.
Esta primera etapa de la tarea del docente, llamado a veces etapa pre-activa, es fundamental ya que permite definir las primeras líneas hacia donde quiero llegar, cuales son los objetivos, las metas de este encuentro. Ésta supone el establecimiento progresivo de principios pedagógico para actuar de una manera y no de otra.
Situándonos específicamente en la pregunta de qué recursos utilizar es desde donde podemos apreciar con más notoriedad el cambio de paradigma en la sociedad. La puesta en marcha de una sociedad globalizada y los avances en el área de la Tecnología han dado lugar al espacio de la Tecnología Educativa, espacio, entre otros, desde donde han surgido nuevos recursos y materiales para utilizar en el aula.
Materiales que posibilitan un modo nuevo de posicionarse frente a la información y que posibilitan también redescubrir el rol del que aprende y del que enseña, ya que la adopción misma de un recurso u otro dará un cierto encuadre a la actividad y al contenido mismo que demandará nuevos quehaceres.
El apropiado uso de las Tics en la educación puede propiciar aprendizajes significativos basados en la operatividad, la interrelación con los otros y con el ejercicio de la propia práctica del que aprende. Permitirá también una circulación más fluida de la información y trasmisión de la información producida.



OTRAS SI ...


Podríamos comenzar por realizar una clasificación de los recursos digitales que se pueden incorporar al ámbito educativo. Los mismos pueden clasificarse según la finalidad de su uso desde la propuesta de Gros Salvat (2000) en:
Programas instructivos
Programas de creación o programas “vacíos”
Programas para el desarrollo de habilidades y estrategias
Programas de comunicación
Programas de consulta y acceso a la información

Todos los materiales incluidos en estas categorías contiene características especiales y trabajan algunos aspectos por sobre otros. Por ejemplo:
Los programas instructivos son especialmente pensados para el proceso de enseñanza y de aprendizaje. Su principal finalidad es transmitir un determinado conocimiento apoyando el desarrollo de contenidos de un área y nivel específico.
Los programas de creación son utilizados como herramientas para realizar alguna actividad, por ejemplo, la escritura. Estos programas pueden dividirse en dos clases: herramientas de producción y programas “vacíos”.
Los programas de comunicación apuntan a brindar herramientas que faciliten la comunicación para logar mejores resultados en el trabajo colaborativo. Algunos ejemplos son: chat, correo electrónico, foros, videoconferencias.
Los programas de consulta y acceso a la información se proponen intervenir en la facilitación de búsqueda y selección de la misma. Algunos ejemplos de ellos son los buscadores, los enlaces.
Los programas para el desarrollo de habilidades y estrategias buscan trabajar aspectos procedimentales y el desarrollo de estrategias. También pueden usarse para aprender contenidos curriculares específicos. Como ejemplos de estos recursos mencionamos los juegos de aventuras, programas de resolución de problemas, juegos de computadora, las simulaciones.

Cabe destacar dentro de los materiales educativos tecnológicos el uso de las llamadas WEBQUEST y de las CACERÍAS O BÚSQUEDAS DEL TESORO. Las mismas son actividades orientadas a la investigación en las que la información proviene de Internet. El uso de las mismas en la tarea áulica ofrece la integración de Internet al aula, promueve el trabajo cooperativo y colaborativo, potencia capacidades en el alumno tales como comparar, analizar información, sinterizarla, hacer un uso óptimo del tiempo de navegación, entre otras.

MIRANDO AL FUTURO



La revolución Tecnológica ya está instalada entre nosotros, la escuela tiene el desafío de ser parte de ella sin olvidar su propia esencia, ser institución que aprende y permite el aprender.
La inclusión de los recursos que bridan las nuevas tecnologías son una oportunidad única para que la escuela aprenda cómo mejorar sus propias prácticas, puede analizarlos y ponerlos al servicio de su tarea.
Al mismo tiempo que innova en estos aspectos deberá también ir pensando el nuevo rol a desempeñar por ella misma y por cada una de los actores que la conforman, ya no como única institución desde donde parte el saber sino también como una colaboradora en la formación de las capacidades y habilidades de cada uno de los sujetos para logar formar ciudadanos críticos y reflexivos frente al uso de la Tecnología.
Sin duda que el rol y la tarea del docente, los recursos y espacios con los que cuentan para realizar sus propuestas de enseñanza y la capacitación en nuevas tecnologías deberá ser el primer cuestionamiento a resolver.
Bibliografía:

  • GROS SALVAT, B (2000): El ordenador invisible. Barcelona: Gedisa. Cap.

  • ADELL, J. (2003) “Internet en el aula: A la Caza de tesoros” Edutec: Revista
    Electrónica de Tecnología Educativa, no. 16, Abril 2003
  • GVIRTZ, S. Y PALAMIDESSI, M. (1998) El ABC de la tarea docente: curriculum y enseñanza. Buenos Aires: Aique Grupo Editor. Cap. 6.

No hay comentarios:

Publicar un comentario